Cada día que paso aquí me doy cuenta de que a los argentinos no les gusta hacer las cosas de la manera más sencilla posible. Les encanta complicarse la vida inútilmente. Como ejemplo usaremos hoy el sistema de identificación argentino.
Existen varios documentos que permiten la identificación de una persona, a saber:
El problema radica en que en algunos sitios te aceptan unos y en otros te aceptan otros. El DNI (y por lo general también la libreta de enrolamiento y la cívica) es aceptado en todos lados como documento de identificación único, pero es muy molesto tener que llevar un librito de un lado para otro, siempre encima para identificarte. Además está la posibilidad de pérdida, lo cual ocasionaría el problema de tener que renovarlo, lo cual lleva un tiempo y un esfuerzo incomprensibles. Así que la mayoría de la gente usa como identificación la cédula, sirviendo en casi todos lados, salvo en bancos y para trámites oficiales.
De manera que para moverte en el día a día hay que usar la cédula, pero cuando hay que hacer un trámite "importante" tienes que sacar el DNI del cajón, llevarlo en lugar seguro y devolverlo a su sitio cuando terminas el trámite, para que no le ocurra nada.
Seguiremos informando.Corto y cierro.
* Estas libretas se crearon antes de la instauración del DNI.
La primera servía para identificar a los hombres para enrolarlos para el servicio militar. Para ese entonces las mujeres no necesitaban estar documentadas, así que hasta que no se les reconoció el derecho al voto (allá por el año 48), no necesitaron un documento, y para tal fin se creó la libreta cívica.
Posteriormente ambos fueron reemplazados por el DNI, dando el gobierno la posibilidad de migrar de un sistema a otro, pero hay mucha gente que no quiere tomarse la molestia (tramitar un DNI aquí es más complicado y duradero que un parto), así que sigue usando estos documentos (como es el caso de mis suegros).
22 marzo 2007
Documentos
Etiquetas: Chapuza
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